Para que una organización pueda diseñar un plan de transformación estratégica óptimo, es crítico que mantenga una escucha activa de las tendencias sociales. Una manera fácil de iniciar esta escucha es mantenerse al tanto de los cambios a través de la información de resultados de las últimas investigaciones publicadas, como el breve resumen que a continuación os presento.

Nos encontramos en un momento de cambio social en el que, a primera vista y pensando en el futuro, se observa que existe falta de certezas, que todo es posible.

En solo un año hemos pasado del efecto promovido por el cambio climático con el movimiento social “#TherIsNoPlanetB”, al impacto del COVID 19.

Existe un importante número de resúmenes a nuestra disposición, datos de estudios realizados y publicados desde asociaciones, empresas de investigación, organismos públicos y privados, que presentan gran cantidad de información contrastada sobre la realidad social de nuestro entorno y el efecto que genera.

Estos datos bien analizados utilizando equipos externos de consejeros asesores expertos, una vez pasados por el filtro de nuestro marco de competencia, nos servirán para definir y ajustar cuál ha de ser el propósito de nuestra organización en el nuevo entorno.

¿Cuál es el sentir general?

El impacto del Covid 19 ha promovido un sentir social de desconcierto, en el que la realidad ha superado a la ficción, en el que los ciudadanos se sienten desprotegidos y se encuentran sin pomos donde sujetarse. En 2021 se han reducido las expectativas de nuestros clientes y hay una importante falta de optimismo.

La sociedad pide a voces sensibilidad, impulso y liderazgo, y desde la activación de respuestas a esta demanda social, las compañías tienen un camino trazado que le permitirá diseñar una estrategia de éxito.

Aquellas empresas que sepan impulsar el cambio, sensibilizar a los stakeholders y liderar la transformación de su sector respondiendo a las expectativas de sus clientes, saldrán ganadoras en esta carrera. 

¿Qué desafíos nos muestran?

Activar el cambio y el progreso:

No es cierto que los desafíos que se observan en la actualidad sean muy diferentes a los que ya nos presentaba la Agenda 2030, lo que si vemos que la crisis del Covid 19 ha generado es un proceso de catálisis. La sociedad se ha encontrado de golpe con la necesidad de acelerar la puesta en marcha de los mecanismos de solución.

Por ello los actores deben evolucionar y buscar nuevos caminos que permitan reducir la fragilidad del sistema. Deben trabajar en entornos conectados teniendo siempre en cuenta la relación “Causa-Efecto” de sus acciones. Analizar los riesgos en clave de oportunidad, teniendo en cuenta la sostenibilidad como factor de supervivencia y el progreso a través del desarrollo científico.

Es necesario mantener una escucha social continua que nos permita descubrir oportunidades.

¿Qué cambios se demandan?

Revalorización de los servicios públicos: necesitamos reforzar la sanidad, apoyar a la ciencia y repensar los modelos educativos.

Transformación del modelo productivo: fortaleciendo el sector primario y reactivando los nuevos modelos de distribución.

Nuevas fórmulas de consumo: activando lo local y utilizando las oportunidades digitales poniéndolas al servicio de nuestros clientes y del planeta. Con el reto de no traspasar las líneas rojas, analizando la información a favor de nuestros usuarios.

Freno al hiperconsumismo y bienvenida al consumo consciente. El cliente actual es un consumidor reflexivo, con capacidad de renuncia, visión a largo plazo, valores sociales compartidos y preocupado por la sostenibilidad.

En el momento actual es requisito “reconstruir la confianza del consumidor”, para ello debemos activar la escucha social y hacerlo de forma empática.

¿Qué recomendaríamos a las organizaciones?

Si la organización tiene la ambición de emprender un proceso de transformación, debe diseñar un modelo consistente y coherente de gestión alineado con su propósito. Un modelo que además tenga legitimidad social.

Para conseguir alcanzar el éxito de forma eficiente, es importante analizar los indicadores con la colaboración de expertos asesores que, a través de la escucha social, nos ayuden a comprender y conectar con las necesidades y expectativas de los ciudadanos, a crear, definir y desarrollar respuestas a sus demandas.

Maria Lizarraga Lacalle 

Pine C&I